Año Nuevo - 2022 - Propósitos, suerte y estrategia.

Se acabó 2021 y empieza 2022. ¿Cuáles son los propósitos de Año Nuevo? ¿Y la rentabilidad de la cartera en 2021? ¿Suerte o estrategia y planificación?

Año Nuevo - 2022 - Propósitos,  suerte y estrategia.
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Y se acabó oficialmente. El 2021. Hoy 1 de enero nos despertamos como todos los primeros de año con las cosas más caras. El gas en la tarifa regulada más de un 5%, los peajes, la electricidad - aunque estos últimos días ha moderado su precio y sólo se paga a 120€/MWh cuando lo normal anteriormente era a 30€ -. En resumen, la INFLACIÓN que parece que seguirá siendo el asunto a tratar en los próximos meses.

Y nos despertamos también con los propósitos de Año Nuevo... o de hace 3 meses... o de hace 3 años y que aún no hemos cumplido. Porque en esto lo importante no son los propósitos que hacemos el día 1 de enero - de hecho veo más sentido hacerlos en septiembre a principio de curso -, lo importante son los propósitos que nos hacemos todos los días a las 7am. Porque son esos propósitos diarios los que nos marcarán cómo irá el camino, sea en la inversión, en cuánto deporte hacemos, o en cualquier otra cuestión de nuestra vida. Así que mi propósito de Año Nuevo es cumplir con los propósitos del día a día. Os mantendré actualizados el día 10 de enero... o no, porque ya no habré cumplido mi propósito.

En lo relativo a la inversión, hoy también es el día de resetear el Excel para afrontar el nuevo año con una nueva hoja en blanco en la que volver a registrar todas esas magníficas operaciones que habré hecho. Según mis datos, la rentabilidad de mi cartera total en 2021 ha sido de un 42%. Y si me fijo sólo en la parte de acciones/opciones, sin contar los fondos ni la liquidez, y que representa un 65%, he obtenido una rentabilidad del 56%. Un 56%. Cuando veo los números casi no puedo entenderlos por lo exagerado y fuera de mi objetivo de tener un crecimiento del 6-8% anual sostenido en el tiempo.

O tengo que lanzar un fondo de inversión, o tengo que pensar que todo ha sido casualidad y suerte.

La suerte y la estrategia

Siendo una persona bastante analítica no creo en la casualidad y poco en la suerte en la inversión. La suerte es lo que tienes cuando te toca algo en la lotería: este año de lo poco que compramos en casa, ni un reintegro. Pero la inversión es algo que controlamos, en el que no podemos influir sobre las decisiones que toman las empresas, pero sí sobre qué empresas y equipos gestores compramos. Y aquí mi plan sigue siendo continuar consolidando una cartera con las mejores empresas de DGI, de growth e incluso alguna small cap con potencial. El 56% no es suerte, es llevar en cartera una empresa como $GOOGL desde hace 11 años.

Mi opinión es que 2022 va a ser un año complejo en la inversión, como de alguna forma ya lo han sido los últimos meses de 2021. Venimos de un año con unas rentabilidades excepcionales, a pesar de la pandemia, en el que casi cualquier compra ha tenido una revalorización excepcional ... menos $BABA. Esta no.

Pero cuando ocurren cosas como la caída de $BABA es donde volver a mirar la hoja de ruta, y los motivos por los que he decidido incorporar esa empresa a la cartera, es fundamental. Y hacer la reflexión de si realmente ha cambiado algo en la empresa tan sustancial como para vender asumiendo pérdidas o es sólo un bache en el camino, y lo que realmente merece la pena es comprar más acciones.

Sin ser una caída tan pronunciada como la de $BABA, $GOOGL pasó de tener un precio en septiembre de 2018 de $1,222 a tener un precio en diciembre de 2018 de $977. Una caída de un 25% en poco más de 3 meses. ¿Era el momento de vender? Yo seguía viendo que era una empresa con unos resultados muy buenos, con una generación de caja brutal, y que lo único que había pasado es que había presentado unos resultados algo más flojos... o cualquier otra noticia momentánea que hizo que la cotización sufriera. ¿Fue un momento de comprar? Creía que sí pero por desgracia para mi ego como inversor en acciones no lo pude hacer porque nos acabábamos de comprar una casa nueva, en la que vivimos ahora, sin vender la casa anterior que tenemos ahora como inversión inmobiliaria. Pero nuestro plan en aquel momento era cambiarnos de casa, por necesitar una más grande, y aprovechar el cambio para diversificar el patrimonio con una inversión inmobiliaria.

¿Debí vender la casa para comprar acciones de $GOOGL? ¿Debí haber comprado BTC en 2011 cuando estaban a menos de $30? O mejor aún, ¿haber arreglado el ordenador de casa cuando empecé a minarlos en 2012 por curiosidad y se rompió la fuente? ¿Debí comprar 1 número entero de lotería número 86148?  Todos tendremos mil ejemplos de cosas que pudimos hacer y que hubieran cambiado nuestra suerte. Pero lo fundamental para mi es trabajar en la estrategia y en el plan de acción. En revisar si las cosas van según ambas, y en ajustar las acciones para que así sea. Y lo único que se ha salido de mi plan este año es el 56% de rentabilidad. Sí, es la rentabilidad extraordinaria lo que no estaba en mis planes. Qué suerte.

Seguir la estrategia y el plan

Para mí el propósito más importante en la inversión no para este año, si no para todos los días, es seguir la estrategia y el plan que tengo marcado. Que no deben ser totalmente estáticos, pero sí que deben evolucionar y cambiar mucho más lentamente que lo que van las noticias de todos los días o incluso los resultados de todos los trimestres de las empresas.

Vamos a tener unos meses o un año con una inflación importante. La pregunta clave no es saber si este trimestre mi cartera hará un +5% o un -10%. La clave es preguntarnos y analizar cómo se comportarán a largo plazo las empresas que llevamos en un entorno de inflación. ¿Podrán repercutir los precios en sus clientes? ¿Cómo de rápido? ¿Cómo de rápido les repercutirán a ellos sus proveedores? ¿Cuánto sufrirán o están sufriendo en el mercado americano la subida salarial?

Pero no sólo nos tenemos que centrar en las acciones. En esa estrategia global entra también el resto de inversiones. ¿Podremos subir el alquiler el IPC? ¿Subirán los tipos de interés y por tanto el pago de la hipoteca de esa vivienda? ¿Cómo nos está protegiendo esa inversión de la inflación?

Y termino centrado en esta revisión de estrategia y plan para iniciar 2022. Es probable que haya alguna pequeño modificación del plan, muy poco probable que haya ningún cambio en la estrategia. Aún así, leerlo y revisarlo es lo que hace más fácil seguirlo todos los días.

Os deseo un Feliz Año 2022.